sábado, 29 de octubre de 2011

F.C Serinyà


Serinyà, cinco de octubre del 2011.

Estimado señor alcalde y regidores:

Somos los componentes de la plantilla del fútbol club Serinyà. Supongo que debe haber oído hablar de nosotros pues desde hace mucho tiempo nos dedicamos a desplazarnos por pueblos gerundenses defendiendo los colores de nuestro municipio con mucho orgullo y profesionalidad, siempre desde la modestia que nos corresponde al ser un club pequeño debido a nuestro reducido presupuesto. Pero vayamos al grano y dejemos ya el humor. Usted y su equipo saben muy bien el porqué de esta carta y están al corriente de nuestra situación aunque parece que no les importe demasiado, pues ni si quiera se han dignado en convocarnos a la reunión que prometieron en verano y a la que todavía esperamos cita. Como ya saben la temporada de fútbol ha vuelto a empezar y los problemas han resurgido en nuestro club, los equipos foráneos se niegan a jugar en un campo de tierra de reducidas dimensiones y por si fuera poco sin agua caliente en unas instalaciones que dejan mucho que desear . La federación gerundense de fútbol nos ha vuelto a dar un ultimátum:

Es la última campaña que utilizan este campo, si la temporada siguiente están en esta misma situación, sintiéndolo mucho, quedaran excluidos de la competición.”

No se preocupen, les haremos llegar este fax por si no nos creen y ya saben que estamos a su disposición para cualquier duda que tengan. Para acabar queremos hacerles saber que nuestro equipo, el fútbol cul Serinyà el año que viene cumple las bodas de plata, si, si, cincuenta años, y sería una lastima que no pudiéramos gozar de ello.

Ustedes tienen la última palabra, por favor no nos dejen en la estacada.

Un saludo”

La plantilla del fútbol club Serinyà.

sábado, 1 de octubre de 2011

Para ti MIguel

Nunca pensé en escribirte una carta y menos en las circunstancias actuales. Si ya se me hubiera hecho difícil hacerlo cuando estabas entre nosotros, más complicado lo veo ahora después de tu inesperado y sentido fallecimiento. Pero la realidad es que al marcharte tan inesperadamente me quedaron muchas cosas por decirte y no quiero dejar pasar la ocasión de despedirme de un gran compañero y padre de mi mejor amigo. Recuerdo los días que nos llevabas a Juan y a mi de pesca a aquel pueblecito de la costa brava llamado Cadaqués. Cómo pasábamos las horas sentados en las rocas observando el mar y escuchando las aventuras que nos explicabas con tanto entusiasmo y que nos ayudaban a pasar gratamente las horas, los días que los peces se proponían fastidiarnos la jornada. Parecerá extraño, pero a veces nos marchábamos sin haber pescado nada pero contentos igualmente por haber podido gozar de tus relatos y consejos y esperando poder volver cuanto antes para repetir la experiencia. Y que decir de tu sentido del humor, sin duda para mi, tu mejor virtud, siempre tenias una palabra alegre y una sonrisa aunque la situación fuera complicada, cosa que hacia disminuir la importancia de los problemas y nos relajaba a todos, sin duda, este don, seguro lo llevas todavía dentro. Podría decirte muchas mas cosas, y pasarme horas hablando de ti, pero quiero que sepas que lo mas importante para mi  es que siempre estarás en mi pensamiento, y haga lo que haga nunca te olvidaré. 

Hasta siempre Miguel...